sábado, 15 de noviembre de 2008

LA VIDA MISMA

El sol se despide diciendo que no sabe si volverá a salir. Los ojos me chorrean tristeza y los párpados me han explotado, pues, según ellos, ya no aguantaban más el horror del universo. Han decidido desaparecer. El camino fácil, dicen algunos. En fin, un suicidio más. Las manos se me agrietan queriendo mostrarme que, sí, cada día soy más vieja, que ya mis dedos al piano no son lo que alguna vez fueron, que el invierno es frío y ellas también lo notan. Pero, ¿y qué?. Camino por las calles desiertas y vomito ideas lejanas, antiguos sueños polvorientos. Del baúl carcomido que en algún lugar interior escondo saco a relucir aquello en lo que una vez creí. La imaginación comienza a brotar como la mala hierba que pretende apoderarse del mundo, sin límites, sin vergüenza, sin miedo alguno. Pues ya nadie la volverá a cortar. Ya las azadas no la dañarán.
Hoy vuelvo a ser niña. Me balanceo en el columpio intentando alcanzar a… mi amigo invisible. Cuánto te he echado de menos, cuántas noches esperando que me dieras el último beso. Y aquí estás, como nunca dejaste de estar. Me como una piruleta y otra y otra más. El estómago me revienta en mil pedazos; me los como también. Mierda, ya no es un cuento de final feliz. Es, al fin y al cabo, la vida misma.

viernes, 14 de noviembre de 2008

EL TEATRO

Aquello que me hace dudar de si la vida es realidad o pura ficción.
Aquello por lo que me asaltan dudas sobre quién soy.
Las palabras me dejan petrificada en la butaca o en el cemento de la calle.
Los gritos son espeluznantes; las risas contagiosas.
Un mundo mágico en el que uno deja de ser para convertirse en aquello que en un momento dado le apetece reflejar.
Y nadie dice nada; no hay malas caras, envidias o desprecios.
Porque ya nadie es, o ya todos somos.
Es, en fin, una pócima para la vida feliz, las noches alegres y las sonrisas continuas.
Es, en fin, el teatro.

ÚLTIMO BAILE

ÚLTIMO BAILE
Bailaré hasta saciar todos mis anhelos, sintiendo cada soplo musical como la esperanza de que otro mañana será posible. Así, hasta bailar con la muerte, última compañera de todos, aquella a la que tendremos que conceder el baile que cierre la fiesta. N.O.G.

OLOR A CALLE

Te aferras a mí como un recuerdo, fruto de largas horas vagabundeando.
Te quiero en mí destructor del olvido, evocando horas pasadas.
Visualizo en tu aroma sugerencias vividas.
Fragancias exquisitas y nauseabundas como dos enamorados fusionadas.
Imágenes bellas y mortales grabadas en tu presencia.
Frases y pláticas como voz lejana.
Sonrisas y sollozos desgarrados pugnan por escapar de tu interior.
¿Dónde quedo yo?
¿Habito en mí o en ti?
No me dejes en el abismo de la ignorancia.
Arrópame con tu manto aromático, guárdame en el recuerdo de lo que alguna vez fui.

N.O.G.

"...pero vosotros ciegos estáis cuando no conocéis que nacéis para padecer y morís para descansar."

¿Qué valor damos a la vida?
¿Qué consideramos que somos durante nuestro viaje?
¿Cuál es nuestra misión? ¿Padecer?
Sinceramente, creo que la vida es lo más bello que posee el ser humano. Descansaré al morir, pero después de haberme cansado de felicidad.
N.O.G.
Cuentan que Ulises, harto de prodigios, lloró de amor al divisar su Itaca verde y humilde. El arte es esa Itaca de verde eternidad, no de prodigios.

Jorge Luis Borges

NACÍ CON LAS MANOS VACÍAS

Y llenas de cuentos. Las manos sirven para escribir, amar o tejer. Hay para quien es el más dulce de los tormentos. Las manos pueden ser grandes, fuertes, etereas, capaces de todo y de nada. Demuestran y hacen mucho. Nací con las manos vacias pero llenas de historias que escribir, amar o tejer. Nací con las manos surcadas de ti pero sobre todo de mí.
CSB.

LA BELLEZA DE UN INSTANTE

LA BELLEZA DE UN INSTANTE
N.O.G.